Las historias y relatos aquí contados son ficticios productos de la imaginación de una abeja trabajadora compulsiva.
Cualquier parecido con la realidad, es mera coincidencia.
Ya basta de culpar a la genetica, a los cambios hormonales a los ciclos astrales o hasta a los hijos.
Porque ahora resulta que, para el caso de las mujeres, el estar embarazadas siguen creyendo religiosamente en sus ideas arcaicas que hay que comer por dos, cuando es bien sabido por los medicos que hay que alimentarse con una dieta balanceada; eso si, no solo cuando se esta embarazada y no solo para el caso de las mujeres.
Cuantas veces no nos hemos topado con el tío que nos dice: "pues yo prefiero ser un gordo simpatico a un flaco que de lástima". Pero que yo sepa una persona obesa no causa gracia, mas bien se toma generalmente como objeto de burla, que no es lo mismo.
En fin, como dice el creador, luego no te estés quejando.
Ya basta de culpar a la genetica, a los cambios hormonales a los ciclos astrales o hasta a los hijos.
ResponderEliminarPorque ahora resulta que, para el caso de las mujeres, el estar embarazadas siguen creyendo religiosamente en sus ideas arcaicas que hay que comer por dos, cuando es bien sabido por los medicos que hay que alimentarse con una dieta balanceada; eso si, no solo cuando se esta embarazada y no solo para el caso de las mujeres.
Cuantas veces no nos hemos topado con el tío que nos dice: "pues yo prefiero ser un gordo simpatico a un flaco que de lástima". Pero que yo sepa una persona obesa no causa gracia, mas bien se toma generalmente como objeto de burla, que no es lo mismo.
En fin, como dice el creador, luego no te estés quejando.
aaahhh! pobre culpa que nadie se la quiere echar y menos si me toca echármela a mi misma.
ResponderEliminarTe haré caso, y me sentiré orgullosa de mi redondeada figura de abeja.