lunes, 3 de agosto de 2009

Méxio y sus mexicanos: Cantinflas


Con todo este rollo de la crisis, que falta empleo, que el gasto no alcanza me puse a pensar ¿qué ayuda a los mexicanos a superar las tragedias? La respuesta es simple: El buen humor. Si le preguntaras a un niño de 4 años (como hizo Darwin) la respuesta que obtendrías sería muy sencilla: “Es reir, hablar y dar besos” y que mejor representante del buen humor mexicano que Cantinflas.

Fue un hombre de origen humilde que con un estilo único de hablar, pantalones a media cadera y sin un centavo en la bolsa, siempre se las ingeniaba para salir de enredos clandestinos, pero legalitos. No sabía leer, pero era excelente debatiendo logrando siempre salirse con la suya.

Era un hombre sínico que siempre llevaba a la pantalla grande las causas del pueblo, como aquel maestro que llegó a un pueblito dejando al descubierto los abusos de los caciques, o la forma en que enalteció al gremio de los barrenderos o los policías, siempre describiendo situaciones de la vida cotidiana con una mezcla de humor y de conciencia social únicos en el cine mexicano.

Cuantos mexicanos no habemos que todos los días nos valemos de ese humor que traemos en la sangre contando chistes picantes, agarrando descuidado al compañero de al lado para decirle uno que otro albur, siempre haciendo pequeñas bromas que nos permiten un respiro ante lo mal manejada que esta la economía, los fracasos de la selección, la falta de empleo y lo desalentador que a veces pinta el futuro.

Un hombre altruista, idealista igual que la abeja que les escribe, una muestra de que perseguir un sueño no es tarea fácil, pero es la única manera de trascender en el tiempo y el espacio. Les dejo un fragmento del discurso pronunciado en su película “Su Excelencia” producida en 1967, pero aun vigente en nuestros días:

“Debemos de pugnar para que el hombre piense en la paz, pero no solamente impulsado por su instinto de conservación, sino fundamentalmente por el deber que tiene de superarse y de hacer del mundo una morada de paz y de tranquilidad cada vez más digna de la especie humana y de sus altos destinos.”

Si quieres leer el discurso completo:

Discurso de Su Excelencia

Si quieres saber mas sobre la vida de su creador:
Mario Moreno

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