Las historias y relatos aquí contados son ficticios productos de la imaginación de una abeja trabajadora compulsiva. Cualquier parecido con la realidad, es mera coincidencia.
miércoles, 5 de agosto de 2009
¿Hiciste algo hoy?
Hoy recibí este escrito por correo eléctronico y no pude resistir las ganas de compartirlo con ustedes:
----------
Mi esposo llego hoy a la casa y me vio sentada en el sofá con nuestro pequeño en una rodilla, y amamantando a nuestro bebe del otro lado.
Estaba tratando de voltear las paginas de un libro con la mano que no sostenía al bebe, mientras atendía a ver si oía el sonido de la alarma de la estufa.
Mi esposo me miró inocentemente, y pregunto: 'Y bien, ¿hiciste algo el día de hoy?'.
Que bueno que la mayoría de mis apéndices estaban ocupados, pues así no pude saltar sobre él y estrangularlo hasta matarlo. Probablemente esto fue lo mejor, ya que asumo que hacer una pregunta estúpida, no justifica el asesinato en este país.
Déjame retroceder un poco y explicarte lo que me llevo a este punto en mi vida. No siempre estuve al borde de la locura.
Al contrario, hace apenas cuatro años, yo tenía un buen trabajo, un ingreso estable, y un vehículo en el cual no cabía más que un equipo profesional de deportes, además de mí. Yo veía shows de televisión cuyos anfitriones no eran marionetas. Me iba a dormir después de las nueve de la noche, y prefería el sexo a quedarme dormida.
Me reía de las personas que viajaban en un remolque con tres niños gritando
y un perro babeando, y le llamaban a eso 'vacaciones'.
Pues bien, ¡Me he convertido en una de esas personas! ¿Que me sucedió?
La prueba de embarazo resulto positiva. He cambiado mi lencería de 'Victoria's Secrets' por pantaletas de algodón y unos buenos brassieres de maternidad.
Adiós, Luis Miguel, bienvenidos: Cri-Cri y las Ardillitas. Mi idea de privacidad ahora, es poder ir al baño sin que un niño de dos años este afuera golpeando la puerta, mientras un bebe este descolgando todo el papel de baño desde mi regazo. Finalmente entendí que el término: 'Mama que se queda en casa', no se refiere a una madre que ya no trabaja fuera de casa, sino mas bien a una que parece que nunca tiene la oportunidad de asomar la nariz por la puerta. Así que heme aquí sentada, con mis niños cargados, tratando de contestar a mí amado esposo ¿QUE SI HICE 'ALGO' HOY?.
Bueno, pues creo que si, pese a que parece que no mucho fue logrado.
Compartí el desayuno en la cama con un apuesto joven. Por supuesto, el desayuno consistió de u! n platito de avena y de migajas de galleta halladas entre las sabanas. El apuesto joven mide noventa centímetros, y solo se excita cuando ve dinosaurios color púrpura, camioncitos de juguete, y papitas a la francesa. También me fui a dar un paseo relajante por el bosque. Por supuesto, tuve que buscar ranas y lagartijas, y que detenerme a soplar algunos 'Dientes de león' en el camino. Lavé también exitosamente una carga de ropa, moví la ropa de la lavadora a la secadora, y la carga que estaba en la secadora fue pasada a la canasta. La ropa de la canasta esta ahora extendida en la cama, esperando mi decisión a la hora de ir a la cama, de guardar esa ropa o de simplemente moverla a mi tocador.
Leí dos o tres clásicos, por supuesto, Dickens y Shakespeare, no son los autores, pues ahora estamos en los trabajos de Andersen, Grimm y otros autores de cuentos de hadas. Creo que no estaré en la sección de adultos de la librería en mucho tiempo.
En los ratos libres, barrí, sacudí, limpié, organice y reacomode. Alivié golpes con besos, y enjugue las lágrimas. Regañe, alabe, abrace, y puse a prueba mi paciencia, todo ello antes de la tarde. ¿QUE SI HICE 'ALGO' HOY? ¡Ya lo creo!.
Ahora ya entiendo lo que la gente quiere decir cuando se menciona que la paternidad es el trabajo más difícil de su vida. En mi VAP (Vida Antes de los Pañales), yo enseñaba a mentes jóvenes como dividir fracciones y escribir complejas oraciones; pero ahora soy incapaz de enseñar a un testarudo de dos años como usar el baño.. Alguna vez fui capaz de manejar por complicadas calles urbanas, mientras hablaba en mi celular y buscaba al mismo tiempo una buena estación de radio; ahora no puedo hacer que las rueditas de mi carreola vayan en la dirección que necesito.
Soy graduada universitaria, tengo una maestría en el extranjero, he escrito artículos en el periódico, he ganado premios, pero no encuentro como quitar las manchas de zanahoria de mi alfombra. Antes, debatía sobre política con mis amigos, ahora hablamos de las ventajas de pañales desechables contra pañales de tela y de cuando dejé de usar oraciones de más de cinco palabras.
Así que, en respuesta a la pregunta de mi esposo: 'Si hice algo hoy, de hecho, he dado un paso mas hacia uno de los mayores logros en la vida'. No, no cure el cáncer, ni contribuí a pactar la paz mundial, pero si sostuve un milagro en mis brazos; dos, de hecho.
Mis niños son mi mayor logro y la oportunidad de criarlos es mi mayor reto.
No se si mis hijos crecerán para convertirse en grandes lideres o en neurocirujanos de nivel internacional. Francamente, ¡no me importa, siempre y cuando crezcan para ser buenas personas!. Ellos son mis mayores alegrías, pese a que muchas veces por la noche me quedo dormida llorando de frustración. El punto es, que hoy pude ver a mis hijos dar otro paso en el gran viaje de la vida, y tuve la oportunidad de mostrarles algunas de las partes del camino. Así como la maternidad es todo un reto, es compensatoria en la misma medida.
Porque estamos usando todos nuestros conocimientos, nuestro talento y nuestras habilidades para formar a una nueva persona. Es esta persona, y esta gente, la que a su vez, usara sus dones para construir nuestro futuro.
Así que cada canción de cuna que yo canto, cada columpio que empujo, cada manita que sostengo es ALGO, y... ¡Lo hice hoy!
----------
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Si, definitivamente es una lastima, vivimos en un país 100% machista, falta mucho por recorrer y precisamente el talón de aquiles es la educación, los valores y la verdadera formación en las escuelas.
ResponderEliminarsaludos
Querida Abejita, hasta que por fín di con tu blog.
ResponderEliminarQuería agradecerte por tus ideales en mi blog, creeme me parecen muy valiosos, y no!! no somos machistas.
solo somos "muy hombres", no, ya en serio, qué malo que existan personas machistas en pleno siglo XXI, si vives en México se dan muchos casos de este tipo, pero como decía Neo, la educación y el ejemplo es la base y la raíz del cambio.
Saludos abejita
Hola Neo, bienvenido, concuerdo contigo en que hace falta muchas formación sin embargo considero que no debemos ya depender de las escuelas porque ni al caso que los gobernantes se pongan a hacer algo. Lo único que nos queda es tomar la educación de las generaciones venideras en nuestras manos y hacerlo en casa. Basta con que cada quien eduque a sus hijos.
ResponderEliminarLordonbest,que bueno que lo encontraste y esperemos que no sea la única vez que nos visites. Cada que tengo tiempo libre, me gusta visitar algunos como Tecnoculto y cuanto te entrevistaron me gusto mucho tu propuesta, así que por ahí me tendrás de vez en cuando.
ResponderEliminarHola abejita mañanera, ya es hora de levantarse son las 8:43 am. ya es hora de levantarse, te dejo encargado mi negocio. Voy a salir
ResponderEliminar:D, saludos Abejita.Buen día y claro que no será la unica ocasion, porque te tengo en marcadores.
Saludos
Como siempre linda Abejita, muy buen post!! Tiene mucho de cierto y creeme que recorde a mas de uno de los hombres que conozco...
ResponderEliminarSaludos cordiales!
me conmovió mucho la frase de "sostuve en mis brazos un pequenio milagro" (o algo así -je-, me la quise guardar en la memoria)... no está de eso compuesta la vida (bueno, yo apenas lo estoy entendiendo)
ResponderEliminarun abrazo mielero
Me disculpo por la tardanza en las respuestas, pero andaba lejos de mi panal.
ResponderEliminar------
Hola Lordonbest, es mala idea encargarme tu changarro, porque a penas puedo con el mio, sin embargo, ya me organizaré para atender los dos.
------
Esme, gracias por la vueltecita ya se te extrañaba por acá.
------
Malbicho, por eso no pude resistir la tentación del copy-paste, relata perfectamente lo que uno siente al tener un bebito.