Las historias y relatos aquí contados son ficticios productos de la imaginación de una abeja trabajadora compulsiva. Cualquier parecido con la realidad, es mera coincidencia.
miércoles, 19 de agosto de 2009
Hablando de nuestro miedos…
Uno de los mecanismos que nos han permitido sobrevivir como especie, según dicen, los que dicen que saben, es el miedo. ¿Parece contradictorio no? pero al sentir miedo nuestro cuerpo descarga adrenalina que un segundo después nos permitirá alejarnos del peligro, cargar objetos pesada o todas esas cosas que logramos hacer inexplicablemente, que incluso se llevan a cabo de manera automática.
Hoy al dar mi paseo por los blogs que me gustan leí entradas sobre impunidad, injusticias, accidentes, desempleo, problemas de adolescentes, leí atentamente los comentarios y un factor común que detecté es el miedo.
Miedo a la incertidumbre, miedo al futuro desolador que nos espera, miedo a las autoridades, miedo a la corrupción; esto me provocó una mezcla de tristeza y alegría, tristeza porque el panorama es gris obscuro tirándole a negro, pero me alegra mucho no ser la única que se esta preguntando ¿Qué podemos hacer para cambiarlo?
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En mi caso particular, estoy atravesando por una crisis laboral personal, esta ultima semana me he definido a mi misma como una “renegada laboral” porque no tengo lo que necesito y percibo tantas y tantas injusticias y en la introspección interior que hice para superar esta etapa, me di cuenta que algo que es determinante en nuestra vida es como enfrentamos ese miedo.
Hablando específicamente del plano laboral, me he dado cuenta que muchas personas practican “los celos del conocimiento”, es decir no te enseñan nada porque tienen miedo que les quites el puesto y que harían ellos si ya no son jóvenes o no saben hacer otra cosa.
Los empleados no exigen (exigimos, dijo el otro) nuestros derechos, como el aumento de ley, que no es mucho pero te ayuda a pagar el estacionamiento, el respeto a nuestra inteligencia o que paguen las utilidades en tiempo por miedo a ser despedidos y perder la fuente de ingresos que sostiene a nuestra familia.
Llegué a la conclusión que lo que me hace falta es saber aprovechar la inyección de adrenalina que te da el miedo, estoy acostumbrada en esos casos a agacharme para no recibir tan fuerte el chingadazo y no siempre eso es bueno. Sería mejor entrenar mi mente a esquivarlo y tomar impulso, tal vez para pegar primero (porque ese pega 2 veces), tal vez para salir corriendo hacia nuevos horizontes, no lo sé, manejar el miedo es algo más o menos nuevo para mi.
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No te limites Abeja... ¡tú dale hasta que el cuerpo aguante!
ResponderEliminarCuando el miedo es tan grande que se convierte en otra cosa, siempre hay experiencias muy placenteras
Abeja Obrera, si somos un país de miedos, en eso nos hemos convertido.
ResponderEliminarY si creo que las personas mayores temen enseñar a los más jóvenes, hemos pasado por tantas crisis que da miedo enseñar o flojera, estamos tan ensimismados en nuestros propios conflictos, en nuestros propios miedos que no vemos que al enseñar a otros no nos quitaran nuestro puesto de trabajo sino que nos ayudará a crecer en la empresa en la que trabajamos, mejores colaboradores mejores rendimientos.
Y el miedo no debería ser enseñar, porqué en este momento no importa la edad para trabajar igual te corren, ese es mi punto de vista, yo soy una afortunada trabajadora, con sus mas o sus menos, depende de la época, en estos tiempos que corren es bueno tener un trabajo seguro, creo que sin miedo deberías aprender calladita de tu jefe inmediato, el día que le aprendas sin él o ella, se lo demuestras, juega con sus propias armas, si de dinero se trata, mal momento Abeja Obrera, en verdad mal momento. Todos andamos en las mismas.
Te cuento un poco, tengo 25 años trabajando en una empresa privada, en el mismo puesto, empecé de 10 je,je, no te creas, bueno no hay otro puesto más arriba, soy una afortunada, pero esa fortuna de tener ese puesto no me permite aspirar a más, salvo ahorcar a mi jefe y sentarme cinco minutos en su silla, ya que al ahorcarlo no quedará nada de mi empresa, bueno yo me peleaba constantemente con él, por cosas de trabajo, y por las prestaciones que debería otorgarme de acuerdo al contrato verbal que tenemos, muchos años yo salía mal parada, hasta que un día lo vi desde afuera, vi sus mecanismos para ganar las partidas, siempre me repetía una frase ¿Cómo dijo, no le entendí? Es una forma de pensar antes de contestar, te da un par de minutos para reflexionar dos o tres respuestas, al final él tenia una gama de respuestas que me desarmaban, un día cansada de este juego que solo me enojaba a mi, lo sorprendí diciéndole ¿Cómo dijo, me puede repetir creo que me distraje? Pude pensar en los motivos, respuestas y un sin fin de cosas, me ha funcionado, y a veces lo he podido desarmar. A las personas que dependen de mi les doy todas las facilidades para aprender más, y mejor que yo, se que en algunas áreas no soy la mejor, pero en otras si. Así que antes de vencer el miedo de hablar, como estrategia yo te recomiendo ver las debilidades del contrario, y después arráncate con la música que más te convenga.
Saludos y mucha suerte
Zed, es lo mismo que siempre le digo a mi marido. Que no te soprenda verlo falco, ojeroso, cansado y sin ilusiones :b
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Menospausas, mil gracias por compartir conmigo tu experiencia tienes razón no he probado esa táctica de usar las armas de mi enemigo, digo, de mi jefe.
Luego te cuento como me fue.
Un abrazo!
tengo miedo... tengo miedo!
ResponderEliminary es real yo siempre tengo si no miedo por lo menos si ansiedad :D
Creo que en mi la adrenalina funciona diferente... A mi me paraliza y entro en shock...
ResponderEliminarPero tu Abejita, a que le tienes miedo?? Con todo lo que sabes y haces??
Saludos cordiales!
SuperKT, no se apure nena, esta usted en la plena edad de la ansiedad. Pero por el momento, no puedo darte muchos consejos, porque de hecho los estoy necesitando.
ResponderEliminarUn abrazo!
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Esme, tienes razón el problema es que a veces uno pierde la perspectiva, pero no te preocupes, ya estoy volviendo al redil.
Hola abeja obrera,
ResponderEliminarEl miedo es una capacidad que ha existido y existirá en los seres humanos porque deviene de nuestros ancestros para sobrevivir y llegar a donde estamos.
Es pues un mecanismo de defensa que nos alerta sobre algún peligro real, pero también puede ser imaginario o infundando, tema que entra ya en un plano piscológico o más.
Pero sentir miedo en algunas circunstancias es importante y hasta necesario pues dependerá de cómo respondas ante él para darle el valor o el plus agregado.
saludoss
si te dijera, yo tenia mucho miedo a las exposiciones, ahora ya no
ResponderEliminarHola Chicos, el fin de semana estuvo un poco ajetreado por eso no me había conectado, sin embargo les agradezco mucho sus comentarios.
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RBC, tienes toda la razón y en el caso del post, el miedo muchas veces es aprovechado por las empresas para explotar a sus empleados.
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Lord, que bueno que lograste superarlo porque cuando vayas a trabajar saber expresarte en público es una habilidad bien valorada.
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Que tengan buen inicio de semana!
abejita... acabo de descubrir tu blog y me encanto, lo que describes respecto al miedo me es tan cercano, en mi caso es miedo al fracaso laboral y sentimental... como sea, leerte me dio unos minutos de compañia, vuela un abrazo y un beso desde aca... muy lejos.
ResponderEliminarBienvenida bella_isabella, me da mucho gusto haberte servido de compañia.
ResponderEliminarTe esperamos de vuelta en esta aventura de la vida cotidiana.